La Guardia Civil ha avanzado en la desarticulación de la banda conocida como los Blood con la segunda fase de la operación Macana. Esta organización criminal operaba en distintas zonas de España y tenía su base de operaciones en Sevilla. La estructura de los Blood era jerárquica y piramidal, controlada desde Madrid mediante redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea.
La operación, en colaboración con la Fiscalía de Menores, resultó en la detención de una persona y la investigación de otras tres por delitos relacionados con pertenencia a una organización criminal. A principios de enero, otras dos personas fueron detenidas por presunta vinculación con la banda.
Los Blood destacaban por su normativa interna y código de conducta, que incluía severos castigos y el pago de cuotas. Además, abandonar la banda sin el consentimiento del líder resultaba en amenazas hacia los desertores y sus entornos. Las actividades delictivas de la banda solían culminar en reyertas durante eventos multitudinarios como la Feria de Sevilla, donde utilizaban armas blancas y otros objetos peligrosos.
Los líderes de la banda en Sevilla se enfocaban en reclutar a jóvenes en situaciones de vulnerabilidad, principalmente en institutos y a través de redes sociales. Los aspirantes a la banda debían superar pruebas o misiones, que incluían agresiones y robos con violencia, para ser aceptados como miembros juramentados.
La operación Macana comenzó en 2022 tras reportes de agresiones y enfrentamientos entre bandas rivales, y ha incluido varias fases de detenciones e investigaciones, disolviendo bloques en Madrid, Barcelona y País Vasco.
La Guardia Civil desmantela el bloque de Sevilla de la banda latina violenta Blood.
Su color distintivo es el rojo. Eso distingue en las calles a los miembros de los Blood de los integrantes de otras bandas, como los Trinitarios o los Dominican don't play (DDP). pic.twitter.com/SvYn0JpFuT
— PLATAFORMA CIU. (@Cuerpospolicia1) January 5, 2024
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